La UE rechaza las muertes de 15 trabajadores humanitarios en el sur de Gaza

En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad internacional, la Unión Europea (UE) ha expresado su condena contundente por la muerte de 15 trabajadores humanitarios y profesionales de servicios de emergencia palestinos. Estos trágicos eventos ocurrieron el 23 de marzo en la región de Rafá, Gaza, debido a un ataque llevado a cabo por las Fuerzas Armadas Israelíes. Este acto ha generado un gran revuelo no solo entre las organizaciones de derechos humanos, sino también entre los gobiernos y las instituciones que promueven la paz y la negación de la violencia en el conflicto israelo-palestino.
La UE, a través de un comunicado oficial firmado por su alto representante para la política exterior, Kaja Kallas, así como los comisionados Dubravka Suica y HuDja Lahbib, demandó una investigación exhaustiva y la responsabilización de quienes son culpables de esta tragedia. La declaración es clara al expresar que la UE está profundamente preocupada por el incremento de las tensiones y la violencia en la región, además de instar a las autoridades israelíes a que levanten el bloqueo sobre Gaza, permitiendo la entrada de ayuda humanitaria necesaria en cantidades adecuadas para los civiles afectados.
El comunicado también destaca la desesperante situación en Gaza, donde la reanudación de las hostilidades ha provocado un mayor sufrimiento entre los civiles. La UE ha subrayado que miles de vidas, tanto israelíes como palestinas, están en peligro debido a esta prolongada crisis, y que las condiciones humanitarias son inaceptables. Los recursos alimentarios y otros tipos de asistencia humanitaria se están agotando rápidamente, lo que agrava aún más la crisis en la zona.
Bruselas enfatiza la necesidad de que se respeten los principios del derecho internacional humanitario, que establecen que la ayuda humanitaria es un derecho fundamental para los civiles atrapados en conflictos armados. En este contexto, se informa que el cuerpo de los 15 trabajadores humanitarios, quienes murieron en el ataque, fue encontrado en una fosa común, junto a sus vehículos. Esto subraya la necesidad urgente de una evaluación independiente e imparcial sobre lo ocurrido.
Las autopsias realizadas han revelado que las víctimas fueron disparadas en la parte superior del cuerpo, lo cual sugiere que podrían haber sido «asesinadas deliberadamente» por el ejército israelí. Eyudjando esta trágica afirmación, existen grabaciones de video realizadas por una de las víctimas, el Dr. Rifate Raduán, que documentan el ataque, mostrando cómo las ambulancias estaban claramente identificadas y activadas con luces de emergencia al momento del ataque inicial.
Por otro lado, el ejército de Israel ha manifestado que abrirá una investigación sobre el incidente, aunque defienden su accionar alegando que respondían a una amenaza, atacando lo que consideraban «terroristas que se infiltraban en ambulancias». Esta justificación ha sido recibida con escepticismo y desaprobación por parte de muchos observadores y críticos, quienes ven en estos actos una violación de los derechos humanos y del derecho internacional. La búsqueda de justicia para las víctimas y la rendición de cuentas siguen siendo una prioridad para la comunidad internacional en este contexto tan complejo y desgarrador.