Una reciente encuesta ratifica la gran impopularidad del presidente de Perú

Lima, 13 de abril (Latin Press) En un panorama político que parece cada vez más sombrío, la aprobación de la presidenta peruana Dina Boluarte ha caído a un notable 4 por ciento, según recientes encuestas. Este dato impactante no hace más que evidenciar el creciente descontento entre la ciudadanía, que ve la estabilidad y la eficacia del gobierno como temas irremediablemente afectados por la incertidumbre, la cual se ha identificado como uno de los problemas más acuciantes que enfrenta el país.
De acuerdo con los resultados publicados por un estudio de opinión, la desaprobación hacia la presidenta ha crecido, llegando ya al 94 por ciento. Las cifras, que fueron analizadas por el reconocido periódico El Comercio, reflejan un «escepticismo sombrío» entre los ciudadanos sobre las acciones y medidas que la presidenta Boluarte ha estado anunciando en sus conferencias diarias sobre asuntos de seguridad, así como sus interacciones con ministros y altos oficiales de la policía y las fuerzas militares.
El desglose de la encuesta revela un hecho preocupante: un abrumador 79 por ciento de los encuestados sostiene que la crisis de incertidumbre no mejorará, con un 46 por ciento que opina que permanecerá igual y un 36 por ciento que teme que la situación empeore. Solo un 10 por ciento de los encuestados considera que la situación podría mejorar tras el reciente nombramiento de Julio Zulueta como Ministro de Asuntos Interiores. Este cambio se produjo después de la renuncia de Juan José Santiváñez, quien dejó su puesto tras enfrentar críticas y un cese de confianza por parte del Parlamento, lo que evidencia el deterioro de la gestión del gobierno y el clamor popular por un cambio verdadero.
El director de la encuesta, Urpi Torrado, contextualiza estos resultados resaltando las recientes manifestaciones que se han llevado a cabo en diversas regiones, donde la ciudadanía ha expresado su desesperación frente a la creciente ola de extorsiones y asesinatos que han plagado a Perú. Esta situación, que ha llevado a un clima de desesperación y caos, ha sido duramente criticada por diversas voces, incluyendo al ex secretario del Interior, Carlos Basombrío, quien argumenta que las acciones del gobierno son insuficientes para resolver la crisis actual.
En un contexto donde la seguridad pública se ha vuelto un tema candente, el pasado jueves se dieron a conocer datos alarmantes sobre el desempleo casi total que afecta a operadores y empresas dentro del sector. La presión social por parte de estos grupos ha llevado a la necesidad de implementar medidas eficaces contra las organizaciones criminales que están causando estragos en el país.
Al día siguiente, se llevó a cabo una reunión de diálogo entre ministros y líderes de protestas que dio como resultado la firma de un acuerdo que establece 13 obligaciones gubernamentales relacionadas con la lucha contra el crimen y la protección de los transportistas. Este cumplimiento se verá evaluado dentro de un plazo de 30 días, en un intento de frenar la creciente violencia.
Los conductores, quienes han sufrido un promedio alarmante de dos muertes entre sus colegas cada semana desde el inicio del año, han decidido suspender de manera radical sus protestas y aguardan con expectativa los resultados de este diálogo, en una espera que, sin duda, pone en manifiesto la angustiante necesidad de soluciones efectivas y rápidas.