Pakistán pide una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU antes de la escalada con India.

Naciones Unidas, el 5 de mayo (Europa Press) – El gobierno de Pakistán hizo un anuncio relevante este domingo, informando que había demandado la convocatoria a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Esta solicitud se produce en medio de un aumento de las tensiones con India, a raíz de un ataque en la región de Cachemira india que dejó un saldo trágico de 26 muertos.
En un comunicado, la misión de Pakistán ante la ONU reveló que había «solicitado formalmente consultas de emergencia privadas» para abordar la preocupante situación. Esta agencia es la encargada de salvaguardar la paz y la seguridad global, y Pakistán está reclamando una disminución de las tensiones en el contexto regional, especialmente entre ellos y la India. La declaración también advierte sobre la gravedad de la situación, marcada por las crecientes tensiones en el área de Jammu y Cachemira, aludiendo a que representa un grave riesgo y una amenaza a la seguridad tanto regional como internacional.
Además, el comunicado apuntó que un representante de Pakistán, cuyo nombre se incluye como Ahmad, se dirigirá al Consejo en este asunto crítico. Es fundamental que la comunidad internacional preste atención a esta cuestión, dadas sus implicaciones para la estabilidad de la región y más allá.
El ataque en Pahalgam, que resultó en la trágica pérdida de 26 vidas, ha sido reclamado por el grupo militar Frente de Resistencia, una organización establecida en 2019 que se encuentra vinculada al grupo islámico armado Lashkar-e-Taba. Este incidente ha provocado una crisis diplomática significativa entre India y Pakistán, reavivando tensiones que han estado latentes desde hace décadas.
Las autoridades indias han acusado a Pakistán en múltiples ocasiones de proporcionar apoyo a distintos grupos armados que operan en Cachemira. Este territorio ha sido motivo de disputa entre las dos naciones desde 1947, llevando a tres guerras a lo largo de su historia después de la independencia del Reino Unido. La última de estas guerras tuvo lugar en 1999, y aunque se logró un alto el fuego después de un intenso enfrentamiento militar, la paz sigue siendo frágil y la situación tensa. Desde 2003, ambas naciones han mantenido un alto el fuego que es constantemente puesto a prueba por incidentes como el reciente ataque, que reavivan las llamas del conflicto en la región.