Nueva erupción del volcán Poás lanza una columna de mil metros

San José, 26 de abril (Latin Press) – En un evento reciente que ha captado la atención de la comunidad científica y el público en general, se registró una nueva erupción del famoso volcán costarricense Poás. Este fenómeno natural ha expulsado una impresionante columna de gases, cenizas y fragmentos de roca de aproximadamente mil metros de altura sobre el cráter activo. Este acontecimiento ha llevado al Observatorio Volcanológico y Sismológico (Ovsicori) a mantener la advertencia roja en la zona, debido a la seriedad de la situación.
La actividad eruptiva ha tenido un impacto significativo en las comunidades que rodean esta importante formación geológica ubicada en la provincia de Alajuela. Además, los fragmentos tóxicos y los productos químicos resultantes de la erupción han exacerbado la contaminación de los ríos en la región, lo cual ha sido motivo de preocupación para los residentes y las autoridades locales.
En su informe reciente, el Ovsicori detalló que la erupción en el volcán Poás fue moderada, empleando términos precisos para describir una columna de resaltación que alcanzó aproximadamente mil metros de altitud. Este fenómeno lanzaba bolas de material volcánico a temperaturas altas, alcanzando hasta 250 grados Celsius. La dirección de la pluma de gases fue hacia el oeste, afectando áreas como Grecia y Sarchí, donde la caída de gases y roca se ha vuelto una preocupación constante, según declaraciones del volcanólogo Geoffroy Avard.
Avard explicó que «el material volcánico» fue expulsado en dirección suroeste; sin embargo, la dirección exacta de la pluma puede cambiar debido a variaciones en la velocidad del viento, lo que podría modificar el impacto en las comunidades aledañas en las horas siguientes a la erupción.
Después del evento del jueves, el cambio en las corrientes de viento provocó que las cenizas cayeran directamente en puntos estratégicos dentro del Parque Nacional, así como en paneles solares y otras instalaciones de monitoreo cercanas al cráter activo. El experto mencionó que «todos estos equipos requieren limpieza y mantenimiento», ya que la acumulación de cenizas y otros fragmentos puede interferir con su funcionamiento adecuado.
Según el Ovsicori, la vigilancia del volcán es permanente y refleja un aumento en su actividad a lo largo de este mes. En respuesta a esta situación, la Comisión Nacional de Emergencia (CNE) decidió el miércoles elevar los niveles de advertencia en diversas áreas cercanas debido al incremento continuo de la actividad del Poás.
Desde el 23 de marzo, el volcán ha estado en una fase más activa, como ha informado el Comité Asesor Técnico, que incluye a expertos de Ovsicori, la Red Sismológica, el Laboratorio de Química de la Atmósfera de la Universidad Nacional y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación. Como resultado de esta creciente actividad, la CNE ha declarado alerta roja para el Parque Nacional Volcán Poás, lo cual incluye áreas críticas como El Mirador, la casa de los visitantes y las Terrazas del Norte y Oeste.
Adicionalmente, las comunidades de los cantones de Grecia y Sarchí, que han estado experimentando caídas de azufre y otros materiales en las últimas semanas, han sido colocadas en alerta naranja. Esto representa una situación de atención urgente para asegurar la seguridad de los residentes y minimizar los efectos adversos de esta actividad volcánica.