El sector de arroz rechaza declaraciones irrespetuosas contra los productores – Actualidad cr

San José, 5 de septiembre (Elpais.cr). -La Cámara Nacional de Agricultura y Negocios Agrícolas (CNAA) expresó su apoyo total al sector de arroz costarricense, que pasa por una de las peores crisis de su historia como resultado de la ruta de arroz redonada, la política que tiene productores prácticos según la organización Productores prácticos según la organización según la organización según la organización con la organización.
La CNAA rechazó las declaraciones de los delegados oficiales Pilar Cisneros Gallo y Alexander Barrantes Chacón categorías, lo que sugirió que los productores buscaron «alternativas» antes de la crisis.
La sala describió estas expresiones de ‘irrespetuosas, desconectadas de la realidad y ofensiva para aquellos que sufrieron la alimentación de costarricenses con dificultad y sacrificio.
Proyecto Fronarroz como medida urgente
La organización insistió en que el país no podía permitirse perder a sus productores de arroz e instó a la reunión legislativa al proyecto de ley. 24.211 (Fronarroz) aprobado, considerado un instrumento clave para salvar el sector, la estabilidad de retorno y garantizar el derecho de los costarricenses a acceder a un alimento básico cultivado en tierras nacionales.
«La ruta severamente llamada Rice ha perjudicado a los productores costarricenses, causando una caída en la producción y poniendo en peligro la estabilidad económica de miles de familias. Es urgente que este fondo esté aprobado para proporcionar apoyo financiero y técnico a los árboles de arroz y evitar una deterioración aún mayor en el sector», Oscar Arias Moreira, presidente de la CNAA.
¿Qué es Fronarroz?
El proyecto de ley Fronarroz busca crear un fondo especial para financiamiento, soporte técnico y re -decoración del sector nacional de arroz. La iniciativa tiene como objetivo garantizar recursos que permitan a los agricultores modernizar sus sistemas de cultivo, mejorar la productividad, enfrentar los costos y adaptarse a la competencia derivada de la apertura comercial.
Además, el Fondo funcionaría como un mecanismo de estabilidad, que proporciona liquidez a los productores que están sofocados por la deuda y los bajos precios del mercado en la actualidad. Para la CNAA, la aprobación de este proyecto es una decisión estratégica que excede lo económico y está directamente vinculada a la seguridad alimentaria del país.
La «ruta de arroz»: una política de cuestionamiento
La crisis actual en el sector tiene sus raíces en la ruta de arroz llamada SO, una política implementada por el gobierno actual como parte de su agenda de liberalización comercial. Bajo este esquema, se redujeron los aranceles de importación de arroz y se eliminaron los mecanismos regulatorios de precios que han protegido históricamente a los productores nacionales.
Según CNAA y varias organizaciones de agricultores, esta decisión causó un aumento en las importaciones de bajo costo, principalmente arroz de los Estados Unidos y América del Sur, lo que causó un colapso en los precios internos y aceleró la desaparición de cientos de pequeños y medianos productores.
Para la sala, esta política pública no solo debilitó la competitividad del arroz nacional, sino que también se expuso a Costa Rica a una mayor dependencia externa de un producto que se considera estratégico para la dieta básica de la población.
Críticas y llamadas a los delegados
La sala de cúpula del sector agrícola, en particular, cuestiona los movimientos de repetición ofrecidos por los legisladores Daniela Rojas Salas (Pusc) y Alexander Barrantes (oficialmente), considerando que estas acciones han retrasado la aprobación de Fronarroz.
Sin embargo, la organización reconoció y renunció al apoyo de los diversos bancos legislativos que plantearon el voto en defensa de la agricultura costarricense, y enfatizó que esta guía política es esencial para detener el debilitamiento de la producción nacional.
«Agro exige respeto y soluciones»
La CNAA enfatizó que las familias de arroz no necesitan «insultos y desprecio», sino políticas públicas serias que reconocen su papel esencial en la economía y la seguridad alimentaria del país.
Finalmente, la sala repitió su dedicación a los productores y llamó a todos los actores involucrados para trabajar juntos en la protección y el fortalecimiento del sector agrícola nacional, advirtiendo que el país en juego no es solo la existencia de miles de agricultores, sino también la capacidad del país para mantener su soberanía alimentaria a mediano y largo plazo.