EE. UU. Califica de ‘reprensible e inaceptable’ la violencia contra Druss en Siria
Washington 1 de mayo. (Europe Press) – El gobierno de los Estados Unidos ha condenado recientemente la violencia dirigida hacia la comunidad Drusa, la cual ha alcanzado niveles alarmantes, manifestándose en la pérdida de más de 75 vidas en ataques sectarios en las cercanías de la capital siria, Damasco. Esta grave situación ha suscitado una profunda preocupación entre las autoridades estadounidenses, quienes consideran tales actos como una expresión de violencia «reprensible».
En un comunicado emitido por el Departamento de Estado, se afirmó que «la reciente violencia y la retórica incendiaria contra los miembros de la comunidad Drusa en Siria son completamente inaceptables». Además, las autoridades fueron instadas a tomar medidas decisivas para detener los enfrentamientos y asegurar que los perpetradores de estos actos de violencia y agresión contra los civiles sean llevados ante la justicia. También se subrayó la necesidad de garantizar la seguridad para todos los ciudadanos sirios, independientemente de su origen étnico o religioso.
El Departamento de Estado estadounidense enfatizó que «el sectarismo solo conducirá a un mayor caos y violencia en Siria y en la región». Refiriéndose a la capacidad del pueblo sirio para resolver sus diferencias de manera pacífica mediante el diálogo, se instó a la creación de un gobierno representativo que proteja e incluya a todas las comunidades sirias, particularmente las minorías étnicas y religiosas que a menudo son marginadas en tales conflictos.
El balance de víctimas sigue aumentando a diario, a pesar de que se reportaron esfuerzos por parte de autoridades y dignatarios sirios en Jaramana, quienes supuestamente llegaron a un acuerdo para mitigar la tensión. Recientemente, el Ministerio de Asuntos Interiores de Siria anunció que este acuerdo «determina la entrega inmediata de armas pesadas y un mayor despliegue de fuerzas» con el objetivo de estabilizar la región y restaurar la normalidad en la zona afectada.
Según el comunicado, «el acuerdo también estipula la entrega de armas individuales sin licencia después de un período específico» y limita la posesión de armas a las autoridades estatales oficiales. Se aseguró que las fuerzas del Ministerio de Defensa se encargarán de garantizar la seguridad en las afueras de Jaramana, aunque se siguen reportando incidentes de violencia.
Por otro lado, Jikmat Jayari, el líder de la comunidad Drusa en Siria, ha solicitado la intervención de un «poder internacional de mantenimiento de la paz» para proteger a su comunidad de la creciente violencia y «prevenir la continuación de estos crímenes». Sin embargo, Damasco se ha opuesto a esta solicitud, argumentando que podría generar más divisiones en la sociedad siria, en lugar de ofrecer una solución real al conflicto.
Jayari describió la reciente violencia como un «ataque genocida injustificado» dirigido a «personas pacíficas que se encontraron en sus hogares» y expresó su pérdida de confianza en el gobierno, afirmando que «ningún verdadero gobierno mata a su propia gente», según informes del portal de noticias Rudow. Esto resalta la desesperación y el temor que siente la comunidad Drusa ante la situación actual.
En respuesta a esta escalofriante situación, las autoridades israelíes han manifestado su intención de llevar a cabo una acción «muy poderosa» en Siria. El Ministro del Interior, Moshe Arbel, y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, han intervenido, señalando la urgencia de abordar la violencia sectaria que afecta a la minoría Drusa en la región.
La violencia estalló tras la publicación en redes sociales de un mensaje considerado ofensivo hacia el Profeta Muhammad, el cual fue atribuido a un líder espiritual Druso. Este incidente ha desatado una ola de «incitación sectaria» y provocó bombardeos israelíes en las cercanías de Damasco, donde las autoridades garantizaron la protección de la comunidad Drusa.
