Disparo de crímenes informáticos en Costa Rica – Actualidad cr

SAN JOSÉ, 9 de junio (ELPAIS.CR) – Costa Rica experimentó un preocupante aumento del 184% en los delitos informáticos durante los primeros cuatro meses de 2025, según lo informado el lunes por el Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicación (MICITT), en un llamado urgente para fortalecer la cultura de la seguridad digital en el país.
Entre el 1 de enero y el 30 de abril, la Agencia de Investigación Judicial (OIJ) recibió un total de 4.545 quejas para ciberdelinas, cuyas modalidades más comunes son las trampas fraudulentas antes mencionadas en las que los delincuentes son hechos por funcionarios bancarios y el phishing, que consiste en el reemplazo de la identidad por parte de E -malicias o maliciosas.
El Micitt atribuye la mayoría de estos crímenes a negligencia o ignorancia por parte de los usuarios. «Estas cifras representan un signo abrumador de la urgente necesidad de fortalecer nuestra cultura de seguridad cibernética», dijo Gezer Molina, director de seguridad cibernética del ministerio.
Una campaña nacional para enfrentar la amenaza digital
Dada esta creciente amenaza, el Micitt anunció que la campaña «es hora de tomar su seguridad digital en serio», una iniciativa que busca educar a la población y hacer que se considera los peligros en el entorno virtual y las buenas prácticas para protegerse.
La campaña comienza oficialmente el 9 de junio y es distribuida por las redes sociales del Ministerio, con material diseñado para ser accesible y comprensible por todos los sectores de la población. Entre los recursos que estarán disponibles están incluidos:
Videos animados cortos que explican conceptos clave de una manera didáctica.
Infografía, con datos relevantes y asesoramiento práctico para la seguridad en línea.
Imágenes ilustrativas, que proporcionan situaciones comunes y recomendaciones útiles para prevenir el fraude.
El contenido abordará problemas esenciales como los métodos de ingeniería social utilizados por los recuentos cibernéticos, cómo identificar el correo electrónico y los mensajes fraudulentos, y cómo configurar correctamente la privacidad en las redes sociales y los dispositivos digitales.
«Es esencial comprender que muchos incidentes tienen su origen en pocas prácticas seguras por parte de los usuarios, lo que facilita el trabajo de los ciberdelincuentes. Por lo tanto, insistimos en la importancia de la prevención y la educación continua para protegerse en entornos digitales», dijo Molina.
La urgencia de una ciudadanía digital más informada
La declaración de Micitt enfatiza que el alcance del aumento de las quejas es un reflejo del cambio en el comportamiento criminal al campo digital, un fenómeno global que no pasó por Costa Rica. En este contexto, el fraude bancario tomó una dimensión alarmante.
Los cibercriminales utilizan la confianza y la ignorancia de los usuarios para acceder a información personal, contraseñas y evidencia bancaria. Las llamadas en las que los estafadores son comunicados por entidades financieras han producido cientos de personas pérdidas económicas significativas.
Además, el phishing, en el que se envían mensajes de correo electrónico o electrónicos que imitan la comunicación legítima, sigue siendo una de las técnicas más efectivas para engañar a las víctimas. Al hacer clic en enlaces maliciosos o proporcionar información en formularios falsos, los usuarios abren la puerta al robo de identidad y el fraude financiero.
Un intento conjunto de proteger el ecosistema digital
El Micitt pide a todas las instituciones públicas, organizaciones privadas y medios de comunicación en el país que participen en la campaña y cooperen en la construcción de una ciudadanía digital más consciente y protegida.
«El compromiso del ministerio es empoderar a los ciudadanos con el conocimiento y las herramientas necesarias para protegerse en el entorno digital. Pero no es una tarea que podamos adoptar solos. Necesitamos el apoyo de todos los actores sociales para fortalecer el mensaje y dar un impacto real», dijo el director de seguridad cibernética.
La seguridad digital, advirtiéndoles contra Micitt, debería ser una prioridad nacional. En un mundo cada vez más interconectado, las amenazas virtuales tienen consecuencias específicas para la vida cotidiana, el sistema financiero y la dependencia pública de las instituciones.
Cultura de ciberseguridad
El ministerio insiste en que una verdadera defensa contra los delitos informáticos comienza con la capacitación de los usuarios. Una de las recomendaciones más importantes que ofrece la campaña es:
No comparta contraseñas o información confidencial por teléfono o medios electrónicos.
Siempre verifique la identidad del e -sil o mensajes sospechosos.
Habilite la verificación en dos pasos en los servicios digitales.
Actualice regularmente los sistemas y aplicaciones de dispositivos móviles y computadoras.
Evite vincular las redes de Wi-Fi públicas sin protección.
La estrategia de Micitt tiene como objetivo generar un cambio de actitud hacia el uso diario de la tecnología, incluidos los hábitos seguros y la promoción de una mayor responsabilidad digital.
El desafío de proteger en un entorno cambiante
El aumento de los delitos cibernéticos en Costa Rica no es un fenómeno aislado. A nivel internacional, las amenazas digitales se han desarrollado rápidamente, y los delincuentes están utilizando cada vez más técnicas más sofisticadas para engañar a sus víctimas.
En este contexto, Costa Rica enfrenta el desafío de fortalecer su marco institucional y legal con respecto a la seguridad cibernética, así como para garantizar recursos adecuados para la educación digital, la investigación penal y la protección de los sistemas informáticos estatales.
La campaña «es hora de tomar su seguridad digital en serio» es solo un paso, pero es esencial, promover una transformación cultural en la forma en que los ciudadanos se relacionan con el entorno tecnológico.
El Micitt concluye su declaración con una advertencia y una invitación: «Los crímenes cibernéticos continuarán creciendo si no actuamos con responsabilidad y conocimiento. Todos tenemos un papel que cumplir en la construcción de una costaza digital más segura».