Poás Volcán Muestra Bombilla por Altas Temperaturas

San José, 15 de mayo (Elpaís).
El fenómeno observado en el Volcán Poás ha llamado la atención de científicos y expertos en vulcanología, quienes han estado monitoreando de cerca la situación actual. Según las últimas declaraciones de la Red Nacional Sismológica (RSN), el color de la luz que emana de esta imponente formación geológica, situada en la provincia norteña de Alajuela, está íntimamente relacionado con las temperaturas extremas que se alcanzan en su interior. Tras semanas de actividad eruptiva que han aumentado significativamente, los científicos han notado un cambio dramático en la tonalidad de la luz emitida desde el cráter.
«A medida que la temperatura interna del volcán se eleva», afirman los investigadores de la RSN, «la radiación comienza a cruzar al espectro visible, resultando en un cambio de color notable, que va del rojo intenso al naranja, luego al amarillo, y en última instancia se transforma en un blanco azulado». Este fenómeno colorido no solo es visualmente impresionante, sino que también es indicativo de los procesos eruptivos en curso.
El esplendor colorido visible desde el cráter es consecuencia de un fenómeno conocido como «radiación del cuerpo negro». Este término se refiere a cómo, a medida que las paredes del cráter se calientan, comienzan a emitir luz visible debido a la temperatura extrema. La RSN ha estado utilizando sus cámaras Philan para estudiar los resultados de las reacciones en el Volcán Poás, permitiendo un análisis más detallado de la dinámica interna del volcán.
Sin embargo, esta actividad eruptiva trae consigo retos significativos para las comunidades circundantes, que han experimentado las consecuencias de las explosiones en forma de columnas que se elevan varios kilómetros en la atmósfera. Los gases y cenizas que emergen del volcán han severamente perjudicado no solo la salud de los habitantes locales, sino también el medio ambiente: los ríos se han visto contaminados, y las plantaciones han sido afectadas negativamente. Ante esta situación caótica, el Parque Nacional, que rodea al volcán, ha permanecido cerrado desde marzo, dejando a muchos locales sin la oportunidad de disfrutar de la belleza natural que ofrece este icónico lugar.