11 soldados pierden la vida en la lucha contra la minería ilegal en la región amazónica de Ecuador

Quito, 10 de mayo (Sputnik) .- Trágicamente, el pasado viernes, un grupo de soldados fue emboscado en Ecuador, resultando en la muerte de varios de ellos en un ataque perpetrado por un grupo criminal en la región amazónica de Alto Punino. Este lamentable incidente, que también dejó a un soldado herido y un atacante fallecido, ha sido confirmado tanto por la oficina del Fiscal Estatal (FGE) como por el Ejército ecuatoriano.
La FGE ha declarado que, una vez completada la identificación de las víctimas, once cuerpos, correspondientes a miembros del ejército, serán llevados al centro forense ubicado en el lago Agrio, en la provincia de Sucumbíos. Esta acción es parte de un procedimiento normal en casos de esta naturaleza, donde se busca dar un cierre adecuado a las familias afectadas por la pérdida de sus seres queridos.
Previamente, la entidad pública había indicado que el ataque a los militares ocurrió mientras estos llevaban a cabo una operación encubierta destinada a combatir la minería ilegal, un problema creciente en esta región del país. El Ejército, en un comunicado oficial, ha señalado que un grupo de cuatro equipos de combate, integrados por un total de 80 soldados altamente armados, estaba desplegado en diferentes puntos para abordar la amenaza de la minería ilegal, además de la emboscada por parte de un grupo criminal identificado como asignaciones fronterizas.
De acuerdo con la información suministrada por fuentes de inteligencia militar, este ataque fue llevado a cabo utilizando explosivos, granadas y diversas armas, lo que pone de manifiesto la gravedad de la situación de seguridad en la región amazónica de Ecuador. Las condiciones en las que las fuerzas armadas realizan sus operaciones son extremadamente peligrosas, y este ataque resalta los riesgos que enfrentan los soldados en su misión de salvaguardar la ley y el orden.
En medio de esta tragedia, el Ejército ha expresado su más sentido pésame y solidaridad a los familiares de las víctimas. En su declaración, reafirmaron su compromiso con la justicia, asegurando que se tomarán todas las medidas necesarias para investigar este caso y llevar a los responsables ante la ley. La situación actual subraya la constante lucha del Ejército ecuatoriano contra la criminalidad organizada que está afectando no solo a sus tropas, sino también a la seguridad de la población en general. Esta emboscada es un claro recordatorio de los desafíos que enfrentan las fuerzas armadas en el cumplimiento de su deber de proteger al país. (Sputnik)