Cerca de mil prisioneros fueron trasladados al régimen de máxima seguridad

San José, 12 de abril (ELPAÍS.CR) — Las autoridades penitenciarias de Costa Rica han implementado hoy un movimiento significativo al trasladar a varios prisioneros a nuevos módulos de alta seguridad. Este movimiento forma parte de una extensa expansión del régimen de máxima seguridad que incluye la construcción de una nueva prisión, que se diseñará siguiendo los planes y técnicas arquitectónicas utilizadas en El Salvador.
Según la información proporcionada por la policía penitenciaria, un total de 151 prisioneros ya han sido transferidos de acuerdo con las directrices emanadas del Ministro de Justicia y Paz, Gerald Campos. Este movimiento es considerado sin precedentes dentro del sistema penitenciario del país, lo que marca un hito en la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado.
El oficial de policía Luis Carlos Jiménez ha afirmado el compromiso de esta fuerza policial para ofrecer el mejor servicio posible, garantizando tanto la seguridad en los recintos penitenciarios como la seguridad del país como un todo. La reciente transferencia de prisioneros se realiza con el objetivo de establecer un control más férreo sobre los individuos considerados de alto riesgo, quienes se definen como peligrosos dentro del sistema.
Además de la transferencia, se incluyó un esfuerzo coordinado para incrementar la vigilancia y control en la prisión de La Reforma, ubicada en Alajuela. Este proceso requirió la ejecución de dos operaciones policiales que llevaron a la incautación de una significativa cantidad de artículos y sustancias ilícitas dentro de las instalaciones, lo que refleja la urgencia de estas medidas.
Entre los objetos incautados se contaron 254.4 gramos de cocaína, 98.6 gramos de marihuana y 96.9 gramos de crack, además de 16 armas blancas e incluso sustancias como hachís y otros medicamentos prohibidos. También fueron confiscados teléfonos celulares, cargadores, chips USB, artículos de joyería y efectivo.
El gobierno costarricense ha destinado un presupuesto aproximado de $35 millones para la construcción de esta nueva instalación penitenciaria, inspirada por el modelo arquitectónico utilizado en El Salvador. Según declaraciones del Ministro de Justicia y Paz, Campos Valverde, la implementación de estos diseños, planes y procesos no solo asegurará la seguridad, sino también la eficiencia en la gestión penitenciaria a largo plazo.
La proyección inicial para la construcción de este nuevo centro penitenciario se estimaba en alrededor de $60 millones, pero gracias a la colaboración y planificación adecuadas, se espera que el costo se reduzca a aproximadamente $35 millones. Campos ha visitado varias instituciones penitenciarias en El Salvador en los últimos días, como parte de su investigación y búsqueda de mejores prácticas para el sistema penitenciario de Costa Rica.
Durante su visita a El Salvador, el Ministro tuvo la oportunidad de reunirse con su homólogo local y otros funcionarios encargados de la infraestructura penitenciaria, reforzando así la colaboración bilateral. Esta sinergia está centrada en diversos temas, como la disciplina dentro de los recintos, la seguridad, la reintegración social de los internos, las oportunidades laborales, y la aplicación de modelos preventivos promovidos por el Ministerio de Paz, lo que indica una intención de modernizar y humanizar el sistema penitenciario en Costa Rica.